Probablemente apenas haya notado el cambio pero, si tiene cierta edad, quizás recuerde los días de las grandes cajas de detergente en polvo. Ya no más. Hoy puede poner más lavadoras con un paquete más pequeño.
En los últimos 20 años (1997-2017), la industria ha trabajado arduamente para minimizar la dosificación promedio de detergente para ropa que se necesita en la mayor medida posible, a través de una combinación de ingredientes nuevos, más concentrados y de alto rendimiento, y ayudando a todos a comprender que pueden usar menos y, aún así, obtener resultados excelentes.
De hecho, la dosificación promedio ahora es la mitad de la que solía ser, lo que significa que en Europa estamos usando alrededor de 3 millones de toneladas al año menos de detergentes para ropa que hace 20 años, a pesar de que hay más hogares y se hacen una mayor cantidad de lavados.
Más compacto significa menos impacto ambiental
Detergentes más compactos significa que se necesita menos embalaje/envase y los productos ocupan menos espacio, por lo que también se necesita menos transporte, evitando más emisiones de CO2 como resultado.
Mientras tanto, el rendimiento es igual o mejor que los productos anteriores menos concentrados, gracias a ingredientes más sofisticados de alto rendimiento que funcionan bien a bajas concentraciones.
Con la compactación/concentración del detergente, la cantidad de químicos activos por lavado permanece igual o, incluso, puede reducirse gracias a estas innovaciones tecnológicas. Por lo tanto, en términos de seguridad ambiental, los detergentes compactados/concentrados son iguales o mejores que sus predecesores menos compactos/concentrados.
¿Cómo puede ayudar?
Puede ayudar a lograr estos ahorros ambientales, al tiempo que ahorra dinero, eligiendo detergentes compactos y luego asegurándose de dosificarlos correctamente, para no usar demasiado.
Todos los detergentes para ropa tienen un símbolo que es un cesto de lavado que muestra cuántos lavados pueden hacerse por envase, para que le resulte más fácil ver cuánto está pagando por cada lavado y hacer una elección sostenible. También le recomendamos seguir la guía de dosificación proporcionada en la parte posterior del envase por el fabricante.
En la mayoría de los envases también puede encontrar un cuadro con consejos para ahorrar agua, energía, CO2 y dinero.